Los líderes tienen la capacidad para describir y transmitir una visualización de un (mejor) estado futuro con las palabras, y llegar emocionalmente a los sentimientos que cautivan e impulsan a los que les rodean. A sus seguidores, fans, equipo, etc. Tanto dentro como fuera de una empresa.
Constantemente los líderes comparten sus puntos de vista sobre el mundo, conceptos, ideas, etc. y rubrican sus comentarios con la dirección que esperan que esperan que tomen.
Un líder no puede desplegar la visión como un individuo.
Y muy posiblemente jamás será capaz de conseguir cambiar nada sin la ayuda de sus seguidores. Pero el poder de movilización del líder puede conseguir un esfuerzo colectivo de los miembros del equipo, y éstos aportan sus habilidades, actitudes, experiencia y energía para hacer esta visualización del líder una realidad.
Una visualización que no tiene gente «que la compre» (y actúe), es y será «una buena idea» que nunca se transforma en realidad.
Para el líder -como para cualquier persona-, es difícil vender algo de lo que no esté convencido no esté verdaderamente convencido. Antes de que pueda convencer a los demás, debe estar firme y convencido como un líder para poder crear confianza.
[smartads]