Matrimonios que se acaban, como llevar a cabo el divorcio express en Murcia
Los matrimonios para toda la vida, existen y son maravillosos cuando los cónyuges pasados muchos años siguen queriéndose como el primer día.
Pero existen desgraciadamente muchos que se acaban. La convivencia es difícil y cuando vemos que cada día que pasa se hace más cuesta arriba seguir compartiendo la vida con otra persona y que el cariño se ha degradado, es mejor plantearse la separación o el divorcio. Si esto ocurre y los dos los tenéis claro, lo mejor que os puede pasar es que estéis de acuerdo. Optar por el divorcio express murcia, es una enorme ventaja para ambos ya que os ahorrareis muchos quebraderos de cabeza, dinero y además conseguiréis en poco tiempo lo que queréis, estar divorciados.
En martinezabogadosmurcia cuentan con una dilatada experiencia en materia de divorcios y se ponen a vuestra disposición para orientaros y aconsejaros como debéis llevar a cabo vuestro divorcio. Como se ha indicado, si estáis de acuerdo, no discutáis más, hablad con los expertos en divorcios y en breve seréis libres para comenzar una vida nueva.
El divorcio y la separación
Son dos conceptos bien diferentes, aunque ambos suponen la interrupción del matrimonio, uno tiene carácter temporal y el otro es definitivo.
Cuando en el matrimonio existen dudas de la continuidad del mismo, lo ideal es optar por una separación, es decir, probar un tiempo a vivir separados es la mejor forma de ver realmente si debéis optar por terminar el matrimonio o por el contrario hay posibilidades de una reconciliación y volver a una vida en común confortable y deseada.
Un separación legal, no disuelve el matrimonio tan solo lo deja en stand-by, es decir mientras se está separado legalmente en un matrimonio en gananciales, no se sigue en este periodo incorporando o vinculando bienes al matrimonio. A partir de ese momento lo que ganen o adquieran, en ese plazo, será de cada uno y el otro cónyuge no podrá reclamarlo si al final se opta por el divorcio.
Otra diferencia entre ambos es que mientras que se está separado los cónyuges no pueden contraer matrimonio con terceras personas, es decir siguen casado, sin embargo con el divorcio y con la sentencia en firme del mismo los cónyuges pasan a ser libres y se pueden casar con quién quieran.
Durante el proceso del divorcio, los cónyuges pueden retractarse en cualquier momento. Mientras no existe una sentencia firme por parte del juez, los cónyuges pueden reconciliarse, comunicarlo y cancelar todo el trámite. Sin embargo, si esta reconciliación ocurriera tras la sentencia de divorcio, para volver a ser matrimonio deben volver a casarse de nuevo.
Es importante destacar que el divorcio es un trámite legal y que nada tiene que ver con la Iglesia, por lo que es necesario obtener también la nulidad eclesiástica.
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