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¿Quién no ha soñado alguna vez con dar la vuelta al mundo? Te guste viajar o no, todos en algún momento hemos soñado con visitar distintos lugares maravillosos. “Nuestro destino de viaje nunca es un lugar, sino una nueva forma de ver las cosas”, decía Henry Miller. Ahora, desde www.londali.es puedes ir de compras por el mundo sin salir de casa. Desde los picos más altos de Nepal hasta las aguas turquesas de México, los templos budistas de Camboya o los coloridos mercadillos y paisajes de India, Londali es una tienda virtual que vende artículos de distintas partes del mundo y que dona un 8% de los beneficios a organizaciones benéficas.

Un proyecto creado por Julie Birch, una joven trotamundos emprendedora que decidió lanzarse y crear una tienda virtual uniendo sus dos pasiones, la moda y viajar. Desde el principio tenía muy claro que no quería olvidarse de la procedencia de cada pieza, destinando el 8% de los beneficios a organizaciones benéficas. La idea de Londali es hacer product sourcing, auténticamente solidario. Julie se encarga personalmente de viajar a los destinos, recorrer el mundo en busca de la pieza perfecta y buscar artesanos que ofrezcan productos únicos, pero comerciales. Promover los mejores trabajos de los artesanos locales y hacerlos accesibles al mercado global de un modo sencillo y bonito.

Londali es una tienda virtual que vende artículos de distintas partes del mundo y que dona un 8% de los beneficios a organizaciones benéficas.

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Un proyecto creado por Julie Birch, una joven trotamundos emprendedora

En el catálogo de productos, se pueden encontrar bolsos de piel de serpiente, fulares y pashminas de cachemir,  joyas de plata y oro con piedras semipreciosas, todas hechas a mano por artesanos de países como Nepal, Indonesia o India.

De momento, trabajan con artesanos de cinco naciones distintas, pero la idea es ir descubriendo nuevos mercados e ir aumentando el número de países y de productos  ofrecidos. Cada producto es único y original y, al tratarse de productos artesanales, el stock es limitado, lo que hace que sea aún más exclusivo.

Todos los productos de Camboya han sido producidos por una ONG del lugar, muchos de ellos víctimas de las minas antipersonas, que todavía plagan todo el país. De hecho, en Camboya hay una mina antipersona por cada dos habitantes. Por lo tanto, ahora puedes ayudar al país comprando –ya sea por amor propio o por su historia– uno de los diferentes productos que se ofrecen, como una pulsera de latón hecha a mano de bombas recicladas por sus víctimas.

Te invitamos a vivir la experiencia desde casa, sólo por el placer de conocer cómo trabajan los artesanos de cada lugar ¡merece la pena!, mientras tanto, la web llena de vida y en constante cambio sigue empapándose de historias que contar, gracias a estos pequeños tesoros encontrados en los sitios más bonitos del mundo.

Por Londali  www.londali.es/

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