Tu negocio anda bien. Tienes clientes fieles a tu marca, las ventas han aumentado, y tus productos se han ganado un lugar en el mercado. Pero no estás satisfecho. Sientes que tu empresa tiene bastante potencial, que puedes hacerla crecer todavía más, y llevarla al siguiente nivel.
Tienes muchas ideas para lograrlo. Abrir nuevos puntos de venta, empezar una ambiciosa campaña de marketing digital, abrirte a nuevos mercados. Pero te das cuenta de que esto te va a costar, y que probablemente tu actual flujo de caja no te permitirá hacer ninguna de estas inversiones.
Finalmente, llegas a la conclusión de que la única alternativa para expandir tu empresa es solicitar un préstamo.
Con la ayuda de un crédito comercial puedes financiar diferentes áreas de tu negocio, y hacer que este crezca de manera exponencial.
Planea cómo vas a usar el préstamo
Conocer las necesidades de tu negocio es clave para saber en qué invertirás el dinero. Por eso, antes de empezar a buscar el prestamista adecuado, tienes que averiguar exactamente cómo usarás el préstamo.
Estas son algunas áreas de tu empresa en las que puedes invertir un préstamo para pequeños negocios:
1.Contrata a personal
Contratar nuevos empleados es una de las inversiones más importantes que debes hacer en tu negocio. Necesitas líderes que aporten habilidades y experiencia a tu equipo. Además, deben tener pasión por su trabajo, y estar alineados con la visión y la dirección de la empresa.
De otro lado, esta es una de las formas más efectivas de aumentar la productividad. Si tienes cinco empleados y contratas cinco más gracias al préstamo, podrás doblar la productividad en la misma cantidad de tiempo. De esta forma el negocio crecerá y conseguirás mayores ganancias.
2 . Invierte en tecnología
Esta es una de las decisiones más inteligentes al invertir el dinero de un préstamo en tu negocio. Al integrar nuevas tecnologías en tus procesos, estarás en capacidad de agilizar y mejorar sus operaciones.
Existen tecnologías disponibles para todas las áreas de tu empresa. Puedes incorporar un sistema de gestión de relaciones con el cliente (CRM), o un sistema de información para el área de recursos humanos, que te permita automatizar los procesos de contratación, nómina y rendimiento de los trabajadores.
También puedes mejorar los sistemas de gestión de mercancías o inventario, con nuevos equipos o software avanzado.
3. Producción
Invertir el dinero en la capacidad productiva de tu empresa es otra gran estrategia. Comprar nuevos equipos y renovar la maquinaria es una de las primeras necesidades para los pequeños negocios. Sin embargo, también puedes mejorar la sede o instalaciones de tu empresa.
A medida que un negocio crece, la infraestructura se convierte en elemento trascendental para su funcionamiento. Con un crédito empresarial, puedes construir propiedades, como un nuevo taller; o ampliar ciertas áreas, como las que están destinadas al almacenamiento de mercancía.
Asimismo, puedes comprar más terreno para llevar a cabo estos proyectos. Todas estas mejoras se verán reflejadas, en el mediano plazo, en el crecimiento de las ganancias.
4. Estrategias de marketing
Para hacer que tu negocio crezca, es imperativo conseguir nuevos clientes, y establecer una relación de confianza con ellos. Diseñando un plan de marketing puedes atraer a más clientes, ya sea a través de los medios sociales, correo electrónico, eventos, o medios de comunicación tradicionales.
De igual modo, puedes invertir el dinero del préstamo para contratar los servicios de una agencia de marketin, para que te ayude a construir tu marca y a lograr más reconocimiento entre los consumidores.
Sin importar qué tipo de negocio tengas, puedes invertir el dinero de un préstamo para hacerlo crecer. Julio Mireles es un empresario latino que vive en los Estados Unidos. Gracias a un préstamo, ha podido sacar adelante a su familia con un negocio de comidas.
El crédito que obtuvo le abrió las puertas a otros mercados, pudo ampliar su oferta de productos, y conseguir un carro de comidas y otros utensilios para su trabajo. Por supuesto, esto le trajo un mayor reconocimiento, más clientes, y le ayudó a construir un historial de crédito.
Como él, tú también puedes solicitar un préstamo comercial para invertirlo en tu negocio, y lograr mayor rentabilidad.
