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Frente a los riesgos del sedentarismo y obesidad que puede ocasionar el teletrabajo, hay ciertas rutinas recomendadas por los fisioterapeutas que se pueden incorporar en el inicio o en descanso de la jornada laboral para mantenerse activo en el encierro obligatorio por la pandemia.
Una de esas rutinas es el ejercicio en casa. Gracias a las múltiples plataformas digitales ahora no es muy difícil conseguir un entrenador online para retomar los antiguos ejercicios físicos y las metas trazadas como bajar de peso en el menor tiempo posible.
No hay otra mejor forma de generar endorfinas para mejorar el rendimiento laboral, incrementar la concentración y reducir el estrés por la presión laboral y la falta de desconexión digital con el empleador que sigue pensando en que el trabajador estará disponible las 24 horas.
Máquinas
Otra opción ideal es el uso de máquinas para aumentar el nivel de exigencia y sostener un estilo de vida saludable sin sedentarismo del home office. La industria fitness ya ha lanzado diversas máquinas para uso doméstico como elípticas, cintas de correr o bicicletas estáticas para realizar ejercicio cardiovascular o de tonificación muscular en casa.
Ante el obligado distanciamiento social para reducir el riesgo de contagio de la COVID-19, estos gimnasios en casa se han convertido en la salvación de miles de deportistas amateurs.
Los expertos recomiendan realizar ejercicios ligeros durante las pausas del teletrabajo, como caminar para activar la musculatura y el sistema cardiorespiratorio.
Horarios
Los ejercicios pueden ser al inicio del día o durante la jornada laboral ya que seis horas continuas de inactividad frente al computador generará problemas a futuro y visitas constantes a los fisioterapeutas para resolver problemas de dolores musculares, articulares y cardiopatías.
Otra recomendación de los especialistas es organizar un adecuado espacio de trabajo con la silla ubicada a una altura cómoda con relación al computador con la intención de mantener el cuello en posición recta.
Durante las llamadas telefónicas es el momento ideal para cambiar de postura y ejercitar la musculatura.
Sin embargo, la incorporación de estas rutinas debe ser paulatina y gradual para evitar un mayor desgaste con el mayor peso o tiempo de duración de las rutinas.
Otro punto clave es mantenerse hidratado y dejar de entrenar dejando un día de descanso hasta que el cuerpo retome el ritmo que se tenía antes de la pandemia y de normas como el distanciamiento social para evitar los contagios.
Normalidad
Ante la nueva normalidad que parece que ha llegado para quedarse solo queda adaptarse a las nuevas condiciones laborales e incorporar las rutinas necesarias para hacer más llevadera esta crisis sanitaria que parece condenada a quedarse por muchos años más o hasta que más del 50% de la población logre la vacunación.
Hasta entonces el home office y el ejercicio en casa caminarán de la mano para conseguir un estilo de vida saludable de la población que aún permanece temerosa en sus hogares por temor a contagiarse de camino al trabajo o de regreso a casa.
