El coaching y el team building, los mejores sistemas de aprendizaje experiencial y formación

 

En esta ocasión vamos a hablar del coaching y del team building, dos sistemas de aprendizaje enfocados desde perspectivas diferentes pero que tienen en común la mejora de cualquier tipo de proceso, logrando alcanzar los objetivos en cualquier proyecto que tengamos entre manos.

No hay ninguna duda de que la formación es esencial para conseguir alcanzar nuestras metas, pero el problema es que no sólo debemos pensar en la formación individualizada, sino que a la hora de sacar adelante un proyecto, es necesario que nos encontremos dentro de un equipo profesional y equilibrado, capaz de organizar adecuadamente el trabajo para poder alcanzar los objetivos. Para ello tenemos dos sistemas de aprendizaje experiencial que son el coaching y el team building, los cuales vamos a desarrollar un poco a continuación para que valoréis las ventajas que puede aportar en vuestro caso en particular.

Las ventajas de realizar un buen coaching de equipos

A través del coaching de equipos vamos a tener la posibilidad de conseguir una importante mejora para nuestro equipo de trabajo, independientemente de si se trata de una empresa o directamente somos un equipo que tenemos un proyecto entre manos si queremos lograr los mejores resultados lo antes posible.

Básicamente el coaching de equipos tiene como objetivo analizar exactamente el modo en que tenemos que proceder para poder alcanzar las metas que nos hayamos propuesto, consiguiendo en cualquier caso conocer todas y cada una de las habilidades de cada uno de los miembros, buscando el desarrollo individual y dentro del grupo.

Hay que tener en cuenta que el coaching de equipos se desarrolla en tres fases principales que son, en primer lugar la toma de conciencia. Es decir, vamos a analizar el lugar en el que nos encontramos en estos momentos, consiguen averiguar cuáles son las herramientas que tenemos a nuestra disposición en relación con el proyecto, que es lo que nos impide avanzar lo que nos hace tener dudas acerca del modo de conseguir evolucionar, y por supuesto también analizaremos todo aquello que nos gustaría mejorar tanto a nivel particular de cada uno de los miembros como dentro del grupo entero.

Una vez que comprendamos el punto de partida desde el que vamos a salir, lo siguiente es comenzar a fijar objetivos. Es decir, ya conocemos los puntos fuertes y débiles de cada uno, de manera que ha llegado el momento de empezar a marcar unos objetivos que sean sensatos y que no nos obliguen a forzar al equipo más de la cuenta, sino que debemos intentar ser realistas y tener en cuenta que durante el camino irán apareciendo algunos imprevistos que deberemos administrar, lo que significa que también debemos considerar pequeños retrasos con el objetivo de establecer estos objetivos garantizando que los vamos a poder cumplir en todo momento.

Pero no sólo nos vamos a fijar estos objetivos, sino que vamos a analizar el modo en que los podemos llevar a cabo, de manera que nos aseguremos de que lo tenemos todo perfectamente organizado para que, en cuanto nos pongamos en marcha, todo este calculado al milímetro y podamos seguir el plan sin dificultad y consiguiendo siempre ir avanzando paso a paso.

En tercer lugar combinamos con la fase que nos pone en marcha, es decir, ya sabemos el punto del que partimos, conocemos las herramientas que tenemos a nuestra disposición, las que vamos a necesitar, ya nos hemos establecido unos objetivos y hemos estudiar el modo en que los vamos a alcanzar, por lo que ya no nos queda más que empezar a andar la ruta, con lo cual deberemos ir dando los pasos en función de las decisiones que hemos tomado y de la organización que hemos realizado con lo que podremos lograr los objetivos que nos hemos propuesto.

Debemos recordar que el coaching equipos nos va a aportar importantes ventajas como es una mejor gestión tanto del tiempo como de la productividad, a la vez que vamos a optimizar los procesos del trabajo, conseguiremos que todos y cada uno de los miembros adquieran un mayor grado de compromiso con el proyecto que tenemos entre manos, lograremos alcanzar nuestros objetivos y mejorar los resultados en un plazo mínimo de tiempo, y por supuesto también conseguiremos una mejor comunicación y gestión interna, solventando cualquier tipo de problema o conflicto que pueda surgir.

El team building, la mejor forma de potenciar a tu equipo y romper la monotonía

Y por otra parte tenemos el team building, que por supuesto también tiene el objetivo de lograr que el equipo consiga la mejor y más efectiva unión, pero lo hace a través de otro método distinto. Es decir, mientras que con el coaching nos centramos en un proyecto concreto, en el caso del team building lo que hacemos es fomentar el desarrollo dentro del equipo para garantizar que se resuelven todos los problemas, se establece un buen liderazgo y que cada a uno de los miembros conozca su posición, su cometido y aprenda a solventar cualquier tipo de situación que se pueda dar con sus compañeros.

Cuando hablamos de team building nos centramos en una serie de actividades o eventos que se organizan con el objetivo de hacer que todos los participantes trabajen en equipo, ya sea creando un único equipo o varios equipos que compiten entre sí.

Básicamente la idea es establecer un objetivo común para cada equipo, con lo cual se consigue que los trabajadores estrechen sus vínculos a la vez que consigan conocerse mejor, para lo cual tendrán que aportar ideas y buscar sacar el máximo rendimiento de sí mismos, lo cual no sólo permite que exista una mayor unión entre todos los miembros, sino que además también tiene otra ventaja importante que es el hecho de que cada uno de los participantes aprende a analizarse mejor, y también es mucho más fácil que comprenda las razones por las que en ocasiones hay diferencias o incluso fricciones entre dos o más miembros.

[smartads]

En definitiva, hablamos de dos técnicas de aprendizaje experiencial y formación para empresas gracias a las cuales conseguimos una mejora considerable en el rendimiento del equipo, logrando en cualquier caso alcanzar los objetivos a través del autoconocimiento y el desarrollo tanto individual como de todo el equipo en conjunto.