Éstos días pasado hemos ido viendo diferentes aspectos sobre el líder, el liderazgo y el desarrollo personal. Los principales temas han sido qué es un líder, qué hacer para potenciar las dotes de liderazgo y desarrollo personal y qué no hacer. En un resumen «muy resumido» diremos, para aquellos que no nos pudieron seguir (resto de artículos en Liderazgo) que el líder es aquella persona que acompaña y guía a un equipo en la consecución de un éxito común aportando su conocimiento y experiencia de una forma colaborativa que no autoritaria.
En ésta ocasión y de forma breve hablaremos del enfoque del líder. Una cualidad más que debe cuidar el líder para, según lo comentado anteriormente, conseguir los objetivos grupales que forman parte de su labor.
Los líderes se centran en los resultados claves. No se distraen con cosas triviales. Es importante destacar ésto: objetivos y no distracción.
Hagan lo que hagan, los líderes lo hacen con buscando la excelencia; lo que no puede decir que no puedan errar en ocasiones ya que como decíamos en «La humildad, un factor clave del líder«; los líderes no son robots. Pero buscan lña excelencia, «aquella» sobre la que Tom Peters hablaba en «Reinventando la excelencia» y que le llevó al pensamiento de «Think Big» (Piensa en Grande).
La excelencia de un líder se verá distorsionada o borrada cuando el líder se distrae fácilmente o se balancee en torno a lo que encuentre en su camino.
Cuando un líder se centra, ella/él se asegura de que todas las tareas que están a la mano se han completado y no han quedado a mitad de camino. Cuando te enfocas evitas enredarte con muchos problemas a la vez. Ése es el enfoque del líder; sin duda un aspecto clave de su know-how.
