En qué ayudan las redes sociales a los eventos
Aunque sigue habiendo sectores que viven ajenos a la revolución tecnológica actual y al uso de una de sus herramientas más representativas, las redes sociales, es obvio y lógico que el sector de la comunicación no sea uno de ellos.
Comunicar e interactuar son, por definición, dos procesos clave en el uso de las nuevas tecnologías, de internet, el social media y las redes sociales; por orden categorías semánticamente desglosadas que nos llevan hasta soportes como Twitter, Facebook, LinkedIN o Google+ como “las redes” más utilizadas del mundo; con el permiso de determinadas redes sociales rusas y chinas que aunque locales, si así puede decirse, aglutinan a millones de seguidores.
El uso de las redes sociales, como todos sabemos, permite comunicarnos rápidamente y en tiempo real compartiendo información, creando un “contagio de información” o efecto viral que no puede ser ignorado por las empresas organizadoras de eventos. Éstas saben que con una buena planificación, desarrollo, ejecución, control y seguimiento de sus acciones en las redes van a conseguir maximizar sus audiencias y ahorrar costes.
Para maximizar audiencias, tal y como les comentamos en El Marketing Digital en la organización de eventos, podemos llevar a cabo “acciones previas antes de la celebración del acto, para así crear expectativas y atraer la atención del público”.
La creación de una landing page que lleve a la acción a los interesados en un evento, con integración de vídeos, información de calidad, menciones, hashtags, invitaciones y un agitamiento activo de las redes sociales, son factores determinantes que harán que el buzz marketing y el boca-oreja genere un entorno muy positivo hacia el mismo.
Contar con influencers en social media, viralizar contenidos relacionados con el evento y llevar la acción de promo-publicidad viral del evento a terrenos creativo-digitales diferentes nos llevará sin duda ninguna a triunfar y conseguir que la fase de promoción del evento sea un éxito.
Ahora bien, quedarse en estos aspectos y no aplicar una dosis de creatividad adicional puede llevarnos a pasar desapercibidos. A no utilizar “del todo” las redes sociales y su poder viral, y por viral no debe entenderse que todo vale.
Cada vez más los usuarios de las redes sociales, por ejemplo de Twitter, requieren mejores contenidos para implicarse en el proceso viral, con oficio y sin beneficio por lo general, así como compartir los contenidos que nos llevarán al éxito en la e-com de nuestro evento.
¿Un QR interactivo y de colores?, ¿Una infografía de los ponentes del evento?, ¿Un concurso participativo con entradas a ganar?….¡¡¡Creatividad al poder!!!…y nuestro evento lo tendrá todo para ser un éxito.
