Disfrutar de unas buenas y relajantes vacaciones este verano, puede ser más sencillo de lo que piensas y tu destino puede estar más cerca de lo que crees. Girona es una buenísima opción para desconectar y disfrutar de las múltiples opciones que te ofrece esta ciudad, comenzando por inspeccionar dónde vas a dormir y echando un vistazo a todos los hoteles en Girona que hay y así decidir cuál es el alojamiento que más te conviene de acuerdo a tus posibilidades económicas y a tus intereses.
Por supuesto, la mejor opción siempre es dormir en la zona más céntrica para no tener que desplazarte mucho a la hora de ir a los sitios que más te interesen, los cuales suelen estar siempre en el cogollo de la ciudad.
Una vez que ya tienes claro cuál va a ser el hotel donde te vas alojar ya estás listo para conocer Girona, tanto la ciudad como los alrededores que no te dejarán indiferente. Girona, aunque mucho menos visitada que Barcelona, tiene un encanto especial que deja con muy buen sabor de boca a quien la visita.
Hablando de buen sabor de boca, también es un excelente lugar si se quiere hacer turismo gastronómico y disfrutar de la ciudad desde otro punto de vista, desde el punto de vista del paladar.
Para ello, hay una serie de restaurantes en Girona donde encontrarás platos de todas las nacionalidades como japonesa, china, argentina…
Aunque normalmente los turistas buscan más deleitarse con algunos de los platos más típicos y tradicionales del lugar, ya que como la comida casera no hay nada, aquí algunos ejemplos:
1 – El suquet de pescado es uno de sus platos más típicos, y es que, obviamente, se benefician de la calidad del pescado que les proporciona la Costa Brava. Se elabora con una salsa compuesta de almendras, ajos aceite y pan que se le añade al rape y a la gamba roja y también se hace un caldo con las espinas del pescado dando como resultado un plato exquisito.
2 – Trinchado de patata y col con tocino: se trata más de un plato de invierno que de verano, pero también lo encontrarás en las cartas de los restaurantes en los meses más calurosos. Como ingrediente más característico destaca la col verde del Pirineo.
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3 – Otra receta que seguro te sorprenderá es la que conjuga elementos tanto de mar como de montaña, mezclando, por ejemplo, langosta con pollo, aunque las posibilidades de este plato son muchas pudiéndose realizar otras mezclas curiosas.
4 – Y para quien le guste un toque de dulzor en sus platos no se debe dejar de probar la butifarra dulce con manzana confitada ¡Una mezcla deliciosa! Y es que la sensación en el paladar de dulce y salado es una característica que gusta a muchos.
5 – Para el postre no dudes en ir al puesto Rocambolesc del afamado Jordi Roca y degustar uno de sus originales helados en el mismísimo centro de Girona. Y si te quedas con ganas, justo enfrente encontrarás también los xuxos, unos riquísimos bollos de crema que tampoco te dejarán indiferente.
