Opinión – Marketing y Fidelización / Recuerdo aquellas palabras que mencionó Bruce Lee en una de las tantas entrevistas que le realizaron; su filosofía era simple: adáptate a los cambios y evoluciona, no seas una persona que se queda estancada en un recipiente con forma rectangular, debes de buscar aquello que te haga distinto y adaptarte.
El enfoque que le daba Bruce Lee era para todas las personas, las motivaba a que cambiaran e hicieran todo eso que usualmente no se atreverían a realizar, pero, éste pensamiento cumple con uno de los fundamentos esenciales de la mercadotecnia: Satisfacción al cliente para su fidelización.
El cliente cambia constantemente, se encuentra en movimiento y no puede tomar una decisión de compra, pues continuamente es bombardeado por otras marcas; ¿por qué si se menciona que el cliente debe ser el principal motor de una empresa, ésta no lo toma en cuenta?
Pareciera que los únicos destinatarios de todo producto e idea son los dirigentes de la empresa. Olvidarse del consumidor está prohibido, toda decisión debe verse influenciada por aquellas personas que consumen el producto, no se puede permitir que ellos cambien y que las marcas sigan estancadas en un momento de la vida. Lo que hoy es una necesidad, mañana será algo innecesario; ayer los jóvenes se vislumbraban por un Walkman, hoy no conciben la idea de pasearse por el transporte urbano sin un iPod o algún SmartPhone.
Las empresas que han detectado esos cambios son aquellas que aún conservan clientes, y, que incluso, han conquistado nuevos consumidores, pues guardan esa línea de cambio y tradición. Si Bruce Lee lo retrataba tan perfectamente bien en 21 segundos, ¿por qué debe ser difícil para todos entender dicho pensamiento?
Ese video, así como la película Kinky Boots, debe ser mostrado a todas esas personas que se encuentran al frente de la compañía, aquellos que toman decisiones dependiendo de la tradición con la que se ha llevado su empresa durante años. Es fácil encontrar múltiples ejemplos acerca del cambio, lo realmente difícil es aceptar que lo que se realiza, no es para uso propio, sino para un grupo de personas que ha evolucionado en necesidades, muchas de ellas provocadas por otras marcas que resultan ser la competencia.
[smartads]
Evolucionar con los consumidores, adaptar las formas, ubicar el contexto: “Be Water, my friend”.
Luis Urzua @Wiichouu
