Muchos anunciantes realizan acciones puntuales con grandes ofertas. Interesantes descuentos. Promociones irresisitibles…y el público reacciona. Otros lo intentan, y no consiguen transmitir el mensaje, vender y, en consecuencia, no logran sus objetivos. Hay de todo, como todos sabemos….
En el terreno online, buscando un simil con la publicidad tradicional, los anunciantes llegan al público con anuncios estáticos, dinámicos, rich media, video marketing y, como no, mediante los resultados de búsqueda en los buscadores. Es decir mediante SEO optimizando su página (más que sus competidores), o mediante SEM y anuncios patrocinados.
Todas estas acciones publicitarias online, como las tradicionales tipo publicidad exterior, publicidad en televisión, pegada de carteles, buzoneo, radio, cine, revistas, radio,. etc….provocan unos resultados. Unos resultados a veces medibles, cuantificables, con inversiones diversas y reacciones variables. Unas alcanzan el éxito, y otras no; como les decía al principio de este artículo de opinión.
Los resultados, sean más o sean menos, son eso: resultados. Una estadística y un montante económico, que en función de la inversión nos dará un ROI positivo o negativo. Una rentabilidad o una pérdida. El éxito o el fracaso.
¿Algo más?
Bien, ahí es donde quiero entrar.
La publicidad debe «dar algo más». Es decir, debemos de marcar unos objetivos que son LO MÁS IMPORTANTE a mi juicio. Incluso por encima de la rentabilidad directa a corto plazo que resulta de una publicidad bien hecha.
Estoy hablando de Branding. De marca. Del efecto recordación. De lo que permite a muchas marcas no hacer publicidad, o diversificar sus acciones.
Cuando hablamos de recordación, hablamos de memoria. Y teniendo en cuenta que la memoria tiene como función principal olvidar, no recordar pues sino estaría más que colapsada, por así decirlo; debemos de llegar a la parte que selecciona y mantiene una información en nuestro cerebro. La que recuerda.
Pongamos un ejemplo. ¿Cuantas páginas interesantes encontraron la semana pasada?. ¿El pasado mes?.. no hablemos ya de un trimestre, semestre o año. Seguro que muchas. Muchísimas. Pero no las recuerdan. Las olvidaron y no tienen cabida en su día a día, marcado por otras preferencias y un tiempo limitado. Normal, nos pasa (creo) que a todos.
Aunque el ejemplo anterior no es exactamente publicitario, piensen que esas páginas web tuvieron su oportunidad. Una. Pero no nos han recordado que «estamos aquí».
[smartads]
Esto nos lleva a que los impactos, y reimpactos publicitarios son clave para llegar a la memoria de la gente, y que con ellos, crearemos una imagen de marca y uso repetido, que hará que consigamos «entrar». Ser referencia recordable. Ser parte del entorno y usos habituales de una, cien, mil o millones de personas. Ser el comodín que nuestra mente nos dará cuando pensemos en ¿ir a un dentista? ¿Comprar una marca de patatas? ¿Ir a un teatro? ¿Acudir a un restaurante? ¿Pedir una pizza a domicilio?…los ejemplos podrían ser muchos. Piensen…de qué marcas más se acuerdan. ¿Cual es su top of mind) (Marca sugerida por su cerebro y memoria).
Siguiendo las preguntas anteriores, quizás pensaron en «Vitaldent», «Matutano», un teatro famoso de su ciudad, un restaurante próximo y en Telepizza o Domino’s. Estas marcas lograron el objetivo. Entraron en su mente. Y pueden dejar de hacer publicidad por un tiempo, y usted se seguirá remitiendo a ellas. Por tanto…
Estar en la mente y ser la referencia: el gran objetivo
Conseguir que el consumidor acuda a tí cuando requiere de un servicio que prestas : el gran resultado
Muchas Gracias Bárbara!!!!!! …y si es verdad, la #publicidad es necesaria que sino nos olvidamos «de tó» … 😉 Saludos, David @socialetic
Buen artículo! Creo que la publicidad siempre tiene que estar ahí. Las personas desechamos la información de forma rápida, si las marcas no nos recuerdan que están ahí nuestra mente las olvida. Excepto marcas que ya hemos nuestras, nuestras marcas de cabecera.
Un saludo